El tronco gastrocólico de Henle: la importancia de conocerlo bien
El tronco venoso gastrocólico (TVGC) o tronco de Henle es una estructura vascular de vital importancia que se ubica en la encrucijada duodenopancreática y que todos los cirujanos debemos conocer perfectamente, puesto que sus implicaciones son importantes no sólo para los que hacemos cirugía pancreática sino para todos los cirujanos que hacen cirugía del cáncer de colon, que deben ser todos puesto que como a mi me gusta decir “el cáncer de colon es el único cáncer que todos los cirujanos deben saber tratar de forma adecuada y con criterios de radicalidad ”.
Cuando revisamos las referencias bibliográficas, digitales y científicas referentes al TVGC encontramos muchas imprecisiones y referencias incorrectas, casi todas fruto del desconocimiento. El TVGC se forma por la confluencia conjunta de la vena gastroepiploica derecha y de la vena cólica derecha, a las que se une la vena pancreático-duodenal antero superior de forma más o menos constante. No son pocas las referencias existentes en Google (muchas de ellas de artículos científicos indexados) en las que se establece que es la vena cólica media la que forma parte del TVGC, y ello es incorrecto puesto que la vena cólica media drena directamente en la cara anterior de la vena mesentérica superior de forma aislada.
Las implicaciones quirúrgicas del TVGC yo las hago a dos niveles:
1.- En la duodeno-pancreatectomía cefálica es obligada la ligadura de la vena gastroepiploica derecha y la vena pancreático-duodenal antero-superior, que podremos hacer de forma separada o conjunta en función de la anatomía y siempre que sea posible a ras de la vena cólica derecha y preservando ésta siempre que se pueda. La disección debe hacerse de forma delicada y mi consejo es, para preservar el drenaje de la cabeza pancreática y evitar hipertensión de la misma durante el resto de la intervención, que se liguen tras la transección del istmo y justo antes de comenzar la sección de la lámina retroportal.
2.- En las gastrectomías totales o parciales por cáncer es obligada la sección de la vena gastroepiploica derecha lo más cerca posible al TCGC de Henle por motivos oncológicos (exéresis de grupo ganglionar nº5) y debemos estar pendientes de hacer la ligadura lo más selectiva posible y de, si tenemos un sangrado, saber que su origen probable es una pancreático-duodenal cercana que será preciso suturar.
3.- El matiz más importante es el que hace referencia a los accidentes hemorrágicos potenciales que pueden sobrevenir durante la realización de una colectomía derecha por un cáncer de colon en el que estamos obligados a la ligadura lo más baja posible de la vena cólica derecha para proveer una linfadenectomía de calidad oncológica. Las tracciones durante la movilización de la flexura hepática y la ligadura de los vasos cólicos derechos pueden desgarrar o desinsertar de forma accidental bien una vena pancreático-duodenal antero superior o la gastroepiploica derecha, y en esos casos el sangrado del campo es muy aparatoso y a veces agobiante para el cirujano. En estas circunstancias:
a) Nunca jamás debemos pensar en meter un disector o una pinza de cierre u oclusión con objeto de hacer hemostasia mecánica porque entonces generaremos un desgarro longitudinal ya del TVGC y hacer hemostasia será mucho más complejo porque el sangrado será mucho mayor.
b) Lo primero que aconsejo hacer es compresión directa con una compresa y si es posible apoyada por una plancha de metilcelulosa, y dejar caer el ángulo hepático del colon para que haga efecto de presión mecánica durante la compresa. Si volvemos a los 10-15 minutos y retiramos la compresa, probablemente ya encontraremos la hemostasia hecha y sólo necesitamos más apoyo de metilcelulosa porque son pequeños sangrados por microporos venosos que no necesitan otro tratamiento que no sea la compresión y la paciencia.
c) Si vemos que la hemostasia no es posible con compresión, la siguiente medida es coger un punto de sutura de monofilamento no reabsorbible 4 ó 5/0 y realizar hemostasia selectiva directa. En caso de ser una hemorragia mayor, hay que disecar y controlar la vena mesentérica superior en el cuello del páncreas y proceder a la sutura directa del TVGC o su ligadura. Si no somos capaces de controlar la situación, hay que comprimir y pedir ayuda porque de un desgarro venoso no controlado se puede producir un sangrado masivo o no controlable de fatal resultado.